El pueblo de Villamoros ha culminado un ciclo de dos años donde se ha realizado una inversión que supera los 100000€. A la construcción de un moderno depósito de bombeo de alta tecnología se ha añade la remodelación integral de la plaza del pueblo con la instalación de mobiliario con retroiluminación led, la recuperación del pilón de 1923 que llevaba más de 30 años sin agua así como la apertura de un bar propiedad de la Junta Vecinal.

Villamoros de Mansilla es un pueblo nuevo, un punto de interés en el Camino de Santiago y una referencia para el municipio.

Así recogía La Nueva Crónica la inauguración de la plaza:
«Estrellas para deslumbrar al peregrino y un espacio para el pueblo. Con esa idea en la mente el Ayuntamiento de Mansilla Mayor y la Junta Vecinal de Villamoros emprendieron la reforma de la plaza del localidad, enclavada en el Camino de Santiago Francés. El principio rector salió de un concuros de ideas lanzado desde el Consistorio para buscar un proyecto original que diera una nueva vida a este espacio público. La propuesta que resultó ganadora fue la denominada como ‘Estela’, basada en generar un pavimento continuo plagado de llamativas círculos amarillos «donde los más pequeños podrán dar rienda suelta a la imaginación y los peregrinos se encontrarán con un espacio icónico y único».

La singular propuesta resultó ganadora de entre otras cuatro presentadas tras un proceso de deliberación en el que participaron arquitectos, concejales y los representantes de la Junta Vecinal de Villamoros.

Las obras ya están concluidas, después de una intervención integral, que ha convertido una plaza en desuso en un punto de interés en el Camino de Santiago.
Previamente a la remodelación de la plaza se eliminó una edificación del sistema de agua corriente y se procedió a la instalación en otra ubicación con menor impacto visual de una estación de bombeo de última generación con presión variable y automatismos electrónicos, que mejora la eficiencia y reduce notablemente los costes respecto a un pozo elevado. El sistema también será presentado este domingo a los vecinos, que han visto mejorada la red de abastecimiento gracias a esta obra.

En la actuación se ha recuperado también un pilón que data de 1923 y que vuelve a dar agua después de décadas fuera de servicio. De forma paralela se ha mejorado la señalización para los peregrinos, puesto que el paso por la localidad junto a la N-601 supone uno de los puntos negros de la Ruta Jacobea. El concejal de Espacio Público, Medio Natural y Comunicación, Pablo López Presa, apunta que han solicitado una reunión con la subdelegada del Gobierno, para plantear alternativas seguras, que están avaladas por la Asociación de Amigos del Camino de Santiago. Por el momento, a falta de acciones definitivas, se ha colocado una gran señal horizontal alertando a los visitantes del peligro de caminar por el arcén de la carretera. Además, se han señalizado itinerarios seguros que facilitan el avance de los peregrinos sin los riesgos del tráfico.

En total, la inversión realizada ronda los 100.000 euros – unos 30.000 del bombeo y 65.000 de la plaza–. El 80% del coste se ha sufragado con cargo a los Planes Provinciales de la Diputación, mientras que el 20% restante ha sido aportado por el Ayuntamiento, sin necesidad de recurrir a contribuciones especiales de los vecinos.

Esta actuación urbanística se enmarca en un programa de actuaciones culturales, arquitectónicas y paisajísticas desarrolladas por el Ayuntamiento de Mansilla Mayor, con el objetivo puesto en potenciar el Camino de Santiago a su paso por el municipio. El municipio cuenta con monumentos tan emblemáticos como el Monasterio de Santa María de Sandoval con la panera del siglo XVII –en pleno proceso de recuperación– o el popular ‘Palomar de Pepe y Lola’, en el que se han celebrado diferentes ‘hacenderas’ para su puesta valor y conservación. «